Buscar este blog

martes, 16 de junio de 2020

¿Bingo?


Hoy me hicieron la rectoscopia.

El huésped no esta.

Me siento boquiabierta sin saber que pensar. Sin saber que sentir. Reír o llorar.


 Reír me da un poco de temor. Entregarme a la celebración me parece temprano y ¿llorar?, bueno he llorado bastante y llorar me cansa. Aunque también de alegría se llora ¿verdad?

Así que ni lo uno ni lo otro.

Yo sé que este no es el final del camino, que aun falta mucho por recorrer pero hoy es un respiro, un alto donde pararme a respirar.

Y tomar aliento.

No se hasta donde emocionarme.


Ya los doctores me lo habían advertido cuando yo insistía en que se habría ido- aunque se vaya, Doña Gisela, aunque se vaya del recto -me dicen- ya esta en otro lado, en otro cuarto…ha paseado por la casa y tendremos que limpiarla, algo asi como lo que estamos haciendo todos con el coronavirus, pero mas profundo…


Aun el doctor no ha visto el informe de la examen. El resultado de la biopsia no llega hasta dentro de unos días y aun faltan 7 días para la cita y yo sé bien a lo que vamos, el camino aun no termina, las cirugías de recto y pulmón son lo que sigue pero hoy, al despertarme de la rectoscopia y escuchar al dr. Con diciéndome: “salió muy bien, no hay nada” y luego ver las imágenes limpias, sin el huésped, lo único que pude pensar fue : Gracias Dios mío, gracias y sí, sí se puede.


Me callo y agradezco. Agradezco todo. Creo que es lo único que me toca hacer. Agradecer y fluir con lo que venga. Confiar en que todo esta y estará bien, contar mis bendiciones …y sentarme al sol con los ojos cerrados.


Hoy escribo poco. Solo quiero compartir. Sé que quienes que me leen y  me acompañan en este transitar compartirán hoy mi alegría porque es un logro de todos, con tantas oraciones y deseos de sanación. Los invito a hacer un alto en el camino, sentarse al sol con los ojos cerrados y agradecer conmigo. ¿mañana? Mañana sera otro día


Ya voy sintiendo las ganas de pintar creando urgencia y eso es bueno. Me confirma las ganas de vivir. Quisiera acelerar el tiempo y ver retornar los días sin  pandemia para poder abrazar a mis hijos, a mi nieto, a hermanas, mis amigas, a mis amigos…pero si el cancer me enseña algo es eso, paciencia, todo pasa, todo llega.

 

Como me dijo Martin hace mucho tiempo: It will pass. You only have to live through it.

Un dia a la vez.


Este debería ser el final de esta disertación de hoy pero no puedo evitar recordar una cita que leí hoy llena de humor negro y que me hizo reír:


“Yo venceré este cancer asi tenga que morir en el intento”

Estoy aquí entre dos océanos a mis costados. A mis pies, el valle silencioso y sobre mi, este cielo.